martes 4 noviembre 2025 - 20:59
El conflicto entre la República Islámica y Estados Unidos: un enfrentamiento inherente y un choque de intereses entre dos corrientes

Hawzah / en vísperas del 4 de noviembre, Día del Estudiante y Día Nacional de la Lucha contra la Arrogancia Global, el Imam Jamenei, Líder de la Revolución Islámica, se reunió con estudiantes de distintos niveles educativos, incluidos universitarios, así como con las familias de los mártires de la Guerra Impuesta de 12 Días.

Según informó la Agencia de Noticias Hawzah, refiriéndose a declaraciones recientes de funcionarios estadounidenses sobre su disposición a cooperar con Irán, el Imam  Jamenei afirmó: “La cooperación con Irán no es compatible con la cooperación y el apoyo de Estados Unidos al maldito régimen sionista.”

El Líder de la Revolución Islámica calificó de incoherente y carente de sentido que Estados Unidos, mientras brinda ayuda y apoyo continuo al régimen sionista —a pesar de que este ha sido desenmascarado y condenado públicamente en todo el mundo—, hable de cooperación con Irán.

“El gobierno estadounidense a veces dice estar dispuesto a cooperar con Irán”, agregó. “Si detienen su apoyo al régimen sionista, retiran sus bases militares de la región y dejan de interferir en los asuntos regionales, entonces estos asuntos podrían considerarse. Pero eso no es algo previsible, ni ahora ni en el futuro cercano.”

En su discurso, el Imam  Jamenei abordó la enemistad histórica de Estados Unidos hacia la nación iraní y analizó las dimensiones de la toma de la embajada estadounidense el 4 de noviembre de 1979. Señaló: “La ocupación de la embajada estadounidense por parte de los jóvenes puede analizarse desde dos perspectivas: la histórica y la identitaria.”

Desde la perspectiva histórica, el Imam  Jamenei describió el 4 de noviembre de 1979 y la valiente acción de los estudiantes como un día de honor y victoria para la nación iraní. “En la historia de Irán ha habido días de gloria y días de debilidad, y ambos deben conservarse en la memoria nacional”, enfatizó.

Respecto a la dimensión identitaria, explicó que “la toma de la embajada reveló la verdadera identidad del gobierno de Estados Unidos, así como la auténtica esencia de la Revolución Islámica.”

Refiriéndose al concepto coránico de istakbar (arrogancia), el Líder explicó que se refiere a la autosuperioridad. “En ocasiones, un Estado —como lo fue Gran Bretaña en cierto periodo o como es hoy Estados Unidos— se otorga a sí mismo el derecho de intervenir en los intereses vitales de otras naciones, dictarles condiciones, establecer bases militares en países con gobiernos débiles o pueblos inconscientes, y saquear sus recursos. Esa es la arrogancia contra la que luchamos.”

El Imam  Jamenei recordó las conspiraciones de Gran Bretaña y sus aliados para derrocar al gobierno de Mossadegh, subrayando su ingenua confianza en Washington. “Estados Unidos sonreía a Mossadegh, pero detrás de escena, en colaboración con los británicos, organizó un golpe de Estado, derrocando al gobierno nacional y devolviendo al Sha fugitivo al poder”, explicó.

El Líder señaló que el primer enfrentamiento de Estados Unidos con la Revolución Islámica fue la resolución hostil aprobada por el Senado norteamericano. También recordó la indignación popular que se desató tras la admisión de Mohammad Reza Pahlavi en territorio estadounidense: “El pueblo iraní sintió que, al recibir al Sha, Estados Unidos pretendía repetir el golpe del 19 de agosto de 1953 y preparar su regreso a Irán. Por ello, la gente salió a las calles, y parte de esas manifestaciones, con la participación estudiantil, derivó en la toma de la embajada estadounidense.”

El Imam  Jamenei explicó que los estudiantes, en un principio, solo pretendían ocupar la embajada durante dos o tres días, como símbolo del descontento del pueblo iraní. Sin embargo, “descubrieron documentos que demostraban que la magnitud de las conspiraciones era mucho mayor de lo imaginado y que la embajada estadounidense era un centro de intrigas contra la Revolución Islámica.”

“El problema no era la recolección de información”, precisó. “En la embajada se había establecido una ‘sala de conspiraciones’ para organizar a los remanentes del régimen del Sha, a ciertos militares y a otros elementos con el objetivo de actuar contra la Revolución. Al descubrir esto, los estudiantes decidieron mantener el control del recinto.”

El Líder subrayó que atribuir la raíz del conflicto entre Irán y Estados Unidos a la toma de la embajada es un error: “Nuestro problema con Estados Unidos comenzó el 19 de agosto de 1953, no el 4 de noviembre de 1979. La ocupación de la embajada reveló una gran conspiración y amenaza contra la Revolución.”

Añadió que la causa fundamental de las hostilidades y complots contra la Revolución Islámica fue la pérdida de un “botín dulce” por parte de Estados Unidos: “No estaban dispuestos a renunciar fácilmente a Irán y, desde el principio, iniciaron provocaciones no solo contra la República Islámica, sino contra toda la nación iraní.”

El Imam  Jamenei reafirmó que la persistente hostilidad estadounidense hacia Irán después del triunfo de la Revolución es prueba de la veracidad de la frase del Imam Jomeini: “Cualquier grito de protesta que tengan, diríjanlo contra Estados Unidos.”

“La enemistad de Estados Unidos no ha sido solo verbal”, enfatizó. “Ha empleado todos sus recursos: sanciones, conspiraciones, apoyo a los enemigos internos de la República Islámica, instigación y respaldo a Saddam en la guerra contra Irán, el derribo del avión civil con 300 pasajeros, la guerra mediática y hasta ataques militares directos. Porque la naturaleza inherentemente arrogante de Estados Unidos es incompatible con el espíritu independiente de la Revolución Islámica. La diferencia entre ambos no es táctica ni circunstancial; es esencial.”

El Líder criticó a quienes aseguran que el lema “Muerte a Estados Unidos” es la causa de la hostilidad de Washington, calificándolo de tergiversación. “Este lema no es la razón del conflicto. El problema entre Estados Unidos y la República Islámica es una incompatibilidad esencial y un choque de intereses.”

Al ser consultado sobre una posible relación futura con Estados Unidos, el Imam  Jamenei respondió: “La naturaleza arrogante de Estados Unidos no acepta otra cosa que la sumisión. Todos sus presidentes, aunque algunos no lo expresaron abiertamente, buscaron eso; el actual lo ha dicho con claridad, mostrando el verdadero rostro de su gobierno.”

El Líder añadió que esperar la sumisión de una nación con la capacidad, riqueza, herencia intelectual y espiritual, y juventud consciente como la iraní, “es absurdo”. Concluyó: “No podemos prever el futuro lejano, pero hoy todos deben saber que la solución a muchos de nuestros problemas es fortalecernos.”

En esta ocasión, el Imam  Jamenei también instó a los jóvenes a seguir el ejemplo de Dama Fatimah y Dama Zaynab, aconsejando: “Inviten a quienes los rodean a estudiar y aprender de la conducta de estas grandes personalidades.”

Fuente:  JAMENEI.IR

Etiquetas

Su comentario

Usted está respondiendo
captcha