Según la Agencia de Noticias Hawzah, los ismailíes son una rama del chiismo con una historia llena de altibajos y creencias particulares. Esta secta, con interpretaciones únicas de los textos religiosos y una perspectiva diferente sobre el imamato, ha sido siempre objeto de atención y estudio por parte de los investigadores.

Pregunta: ¿Qué creencias tiene la secta ismailí?

Respuesta: Una de las sectas chiíes conocidas, es la secta ismailí. Esta secta tiene una historia llena de acontecimientos. Por ello, la discusión sobre sus creencias y su evolución histórica ha sido continuamente objeto de atención de los investigadores y expertos en sectas.

Principios de las creencias ismailíes

Desde la perspectiva ismailí, Ismail, el hijo mayor del Imam Jafar as-Sadiq (P), es el Imam, niegan su muerte diciendo que él está vivo y oculto (ghayb), algún día aparecerá.

Dios Todopoderoso, creó dos mundos a través de una realidad que llaman la palabra “Kun” (Sé):

1. El mundo interior (batin), que es el mundo de lo oculto, que incluye las inteligencias, las almas, los espíritus y las realidades generales.
2. El mundo exterior (zahir), que es el mundo de la creación y la evidencia, que incluye partes superiores e inferiores, cuerpos celestiales y elementos y los mayores seres de este mundo en orden de grandeza son: el trono (arsh), el pedestal (kursi) y otros cuerpos. Así comienza y termina la cadena de la existencia de Dios. [¹]

La esencia divina está por encima de la imaginación, la razón y el pensamiento. Dios está más allá de toda cualidad o límite y no se le puede atribuir ninguna característica ni por afirmación ni por negación. [²]

Consideran al “Aql Kull” (Intelecto Universal) y “Nafs Kull” (Alma Universal) como dos principios fundamentales, a veces llamados primer y segundo principio. [³]

No creen en el Paraíso e Infierno corpóreos, pero para los principiantes interpretan estos términos en su sentido común y, como los extremistas (ghulat), creían en la encarnación y la transmigración de las almas. Para ellos, el Paraíso es la razón y la llave del Paraíso es el discurso del Mensajero de Dios.

Sus enseñanzas exteriores no difieren mucho de las creencias del chiismo duodecimano, practican las normas religiosas islámicas como la oración, el ayuno, el zakat, etc. [⁴]

La manifestación del “Aql Kull” en este mundo es el “Natiq” (El que habla). Los Natiq son los profetas de gran determinación y su número, es siete. Cada profeta tiene un sucesor o heredero que aprovecha su conocimiento mientras está vivo. Después de cada Natiq, vienen siete Imames. El período de cada profeta es de mil años y cuando finaliza su ciclo, aparece otro profeta y sharía que sustituye al anterior.

En la tierra existe un Natiq, que es el profeta que tiene la sharía, es decir, el profeta que comunica la ley divina que el ángel le revela. Los ciclos de la profecía constan de siete fases, cada fase empieza con un Natiq y un sucesor (Wasi). Una o varias series de siete Imames suceden a ellos y después el ciclo termina con el último Imam, llamado “Qa'im” o Imam del resurgimiento, quien pone fin a la era anterior y es el Imam residente (Muqim). [⁵]

Sobre el imamato creen que el Imam es la manifestación del mundo de lo oculto y su hujjat (prueba o autoridad), es la manifestación del intelecto primero (Aql Kull). El Imam gobierna el mundo interior y es maestro de los demás. Aunque el Imam a veces se oculta, su invitación será manifiesta hasta que la prueba de Dios sea completa para sus siervos. Creen que, además de la hujjat de Dios, siempre existen doce representantes (Naqib) en la tierra que son discípulos y la élite de la hujjat. [⁶]

Existe un Imam que hereda el “Imam Asas” (Imam fundamental) y su tarea es equilibrar lo exterior y lo interior, cuya unión es necesaria.

Según los ismailíes, el imamato tiene cuatro grados

• Imam Muqim (residente): es quien inspira al profeta hablante y es el grado más alto del imamato, también llamado “Rabb al-Waqt” (Señor del tiempo).
• Imam Asas (fundamental): es el sucesor y apoderado del profeta, su confidente y ayudante, y la serie de Imames establecidos continúa en su linaje.
• Imam Mustaqir (establecido): es quien designa al Imam después de sí mismo. Según los ismailíes, la designación del Imam se realiza por dos medios: 1) herencia, 2) nombramiento por el Imam establecido.
• Imam Mustawda' (depositado): actúa en nombre del Imam establecido en la función del imamato, pero no tiene derecho a designar al siguiente Imam. También se le llama “Na’ib al-Imam” (vicario del Imam). [⁷]

Una de las creencias distintivas de los ismailíes en conocimientos y jurisprudencia, es el esoterismo y la interpretación (ta’wil). Según ellos, las leyes divinas tienen un aspecto exterior y uno interior y sólo el Imam y su sucesor conocen el interior. Todo lo que se ha mencionado en las leyes celestiales son ejemplos y símbolos de las verdades internas. Por eso tenían interpretaciones sobre ritos y conocimientos religiosos como la oración, ablución seca, zakat, peregrinación, estos comentarios dieron lugar para que los ulemas islámicos consideraran a los ismailíes como un peligro serio para las creencias islámicas.

El mártir profesor Motahari dijo al respecto: “Los ismailíes han intervenido tanto en el pensamiento islámico con el esoterismo que se puede decir que han invertido el islam.”

Ellos interpretan los versículos coránicos, hadices y las normas religiosas, no aceptando su sentido externo, sino orientándose hacia su sentido interior. [⁸]

Fuentes recomendadas para estudio:

Firaq al-Shi'a (Sectas chiíes) de Nobakhti, Abu Muhammad al-Hasan ibn Musa.

Siyr fi Tarikh al-Shi'a (Historia del chiismo) de Dawood Alhami.

Milal wa Nihal (Sectas y religiones) de Abu al-Fath Muhammad ibn Abdul Karim al-Shahrastani.

Notas:

[¹] Rabbani, Ali, Firaq wa Madhahib al-Kalām, Qom, Markaz Jahani Olum Islami, 1998, pp. 65-73.

[²] Mashkoor, Muhammad Jawad, Tarikh al-Shi'a, Nashr Ashraqi, 1993, p. 226.

[³] Mashkoor, Muhammad Jawad, Tarikh al-Shi'a wa Firaq al-Islam, ibid, p. 231.

[⁴] Tabatabai, Sayyid Muhammad Husayn, Shi'a fi al-Islam, Daftar Intisharat Islami, 1983, p. 53.

[⁵] Hashim Othman, Ismailiyah, Beirut, Nashr A'lami, 1998, p. 66.

[⁶] Rabbani, Ali, Daramadi bar Ilm al-Kalam, Dar al-Fikr, 1999, p. 230.

[⁷] Ibid, p. 231.

[⁸] Ibid, p. 75.

Fuente: Centro de Estudios y Respuestas a Dudas (Hawzah).