Según informó la Agencia de Noticias Hawzah, el difunto ayatolá Misbah Yazdí, en una de sus conferencias, abordó el tema “La primera prioridad del creyente”, cuyo contenido se presenta a continuación.
El Corán es el libro de nuestra religión y nosotros amamos el Corán, pero nuestro comportamiento difiere del de personas como Salmán al-Farsí.
Cuando ellos comprendían el significado de un versículo, se comprometían a cumplirlo y lo observaban con rigor; nosotros, en cambio, no.
Respetamos el Corán, recurrimos a él para la istijara (consulta divina), pasamos bajo él antes de un viaje, pero ¿hasta qué punto nos preocupamos realmente por ver qué nos dice Dios y qué exige de nosotros?
En lo referente a las normas religiosas, mientras no entren en conflicto con nuestros deseos, costumbres locales o familiares, o con los intereses de nuestro partido o grupo político, todo está bien.
Pero cuando surge una contradicción, no queda claro hasta qué punto damos prioridad al Corán.
Cuando el Emir de los Creyentes, el Imam ‘Alí (P), afirma: «En verdad, ves en él una fortaleza en la religión; el creyente evalúa antes que nada su relación con la religión» (Nahŷ al-Balágha, sermón 193),
la señal de ello es que toma la religión en serio: la coloca en la cima de todas sus acciones y deberes, y su principal preocupación, antes que todo, es la religión.
Fuente: Conferencia del ‘Allama Misbah, 12/06/1388 H. Sh. (03/09/2009)
Su comentario