Agencia de Noticias Hawzah – Hablando en un encuentro de reconciliación organizado por Hezbolá en el tercer sector occidental del Líbano, Hoyyat al-islam Sayyed Faisal Shukr, jefe de la región de la Becá de Hezbolá, enfatizó que la opción de la resistencia sigue firme e irreversible. La reunión se celebró en la Asamblea del Imam al-Baqir (La paz sea con él) en Za’arir–Beit Mashik, con la participación de miembros de la familia Mashik y una amplia representación de figuras sociales y políticas.
Según los informes, el encuentro fue supervisado por Sayyed Faisal Shukr junto con Hassan Hamiya, jefe del tercer sector de Hezbolá, y contó con la asistencia de eruditos religiosos, familias de mártires, funcionarios del partido, activistas sociales y tribales, así como representantes de municipios locales.
La Resistencia como camino de dignidad y soberanía
En su discurso, Hoyyat al-islam Shukr subrayó que la resistencia continuará su camino hasta la consecución de la victoria completa, el fin de la dominación estadounidense en la región y la desaparición del régimen israelí. Describió la resistencia como una elección arraigada en la dignidad, la soberanía y el honor nacional, enfatizando que no habrá retirada de este camino bajo ninguna circunstancia.
"Las armas de la resistencia permanecerán en manos de la resistencia", afirmó, añadiendo que la presión externa, las amenazas o las maniobras políticas no alterarían la posición estratégica de Hezbolá.
Énfasis en la reconciliación y la estabilidad social
Junto con su firme postura sobre la resistencia, Hoyyat al-islam Shukr destacó la importancia de la reforma interna y la reconciliación dentro de la sociedad. Señaló que la reconciliación es un principio islámico profundamente arraigado que juega un papel crucial en el fortalecimiento de la paz interna y el refuerzo de la cohesión social.
"La cultura de la reconciliación y la tolerancia es un pilar fundamental para construir una sociedad unificada y resiliente, capaz de afrontar desafíos y conspiraciones", afirmó, subrayando que la unidad social aumenta la fuerza y la efectividad de la resistencia.
Los participantes en el encuentro describieron el evento como un paso hacia la consolidación de la estabilidad social y la resolución de diferencias internas mediante el diálogo, al tiempo que reafirmaban el apoyo colectivo a la resistencia como piedra angular de la soberanía y seguridad del Líbano.
La reunión concluyó con llamamientos a continuar la unidad entre las comunidades y a mantener el compromiso con los principios de resistencia, reconciliación y solidaridad nacional frente a las continuas tensiones regionales.
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