Agencia de Noticias Hawzah – En una declaración emitida el lunes, el organismo vinculado al seminario afirmó que la decisión de la FIFA y del comité organizador de la Copa Mundial de 2026 en Seattle es "tanto sorprendente como profundamente lamentable", subrayando que constituye un claro insulto a las creencias religiosas de cientos de millones de musulmanes en Irán y Egipto, así como de miles de millones de seguidores de las religiones divinas en todo el mundo.
Citando el Sagrado Corán – "Y no os acerquéis a la indecencia, sea pública o secreta" (Sura al-An‘am, 6:151) – la declaración subrayó que el Islam considera explícitamente la homosexualidad como un acto prohibido y reprobable, clasificado entre los pecados mayores. Sobre esta base, afirmó la sede, es inaceptable utilizar eventos deportivos internacionales para promover estilos de vida que contradicen las enseñanzas divinas.
La declaración instó al Ministerio de Deportes y Juventud de Irán y a la Federación Iraní de Fútbol a presentar una protesta inmediata y firme ante la FIFA a través de los canales diplomáticos y legales internacionales, exigiendo la cancelación de la polémica designación y de cualquier programa relacionado. Además, pidió a las autoridades relevantes que consideren seriamente todas las opciones disponibles, incluida la negativa a participar en el partido bajo tal título si la FIFA ignora las objeciones.
Dirigiéndose a las autoridades religiosas de todo el mundo islámico –particularmente a los altos clérigos de Qom y de al-Azhar–, la sede pidió la emisión de declaraciones claras y unificadas que reafirmen la posición del Islam sobre la prohibición absoluta de la homosexualidad. También les instó a exigir a la FIFA que respete las creencias religiosas y se abstenga de convertir los escenarios deportivos en plataformas para promover valores contrarios a la Sharia, movilizando al mismo tiempo a las instituciones islámicas internacionales para que se sumen a una protesta coordinada.
La declaración también apeló a las organizaciones religiosas e islámicas internacionales a expresar una fuerte oposición a la medida de la FIFA y a presionar al organismo rector del fútbol para que incorpore el respeto a las religiones y los valores morales de las naciones en sus políticas.
"El deporte debe servir como una plataforma para la amistad, el respeto mutuo entre las naciones y la promoción de la paz", dijo la declaración. "No debe transformarse en una herramienta para imponer estilos de vida e ideologías que están en profunda contradicción con las creencias de miles de millones de personas en todo el mundo".
Concluyendo su mensaje, la Sede del Liderazgo Deportivo del Seminario exigió una disculpa oficial de la FIFA y del comité organizador del torneo a los seguidores de las religiones divinas –particularmente a los musulmanes, y especialmente a las naciones de Irán y Egipto. También pidió la cancelación inmediata y pública de la designación "Partido del Orgullo" y de cualquier símbolo o programa relacionado, junto con garantías claras de que no se repetirán en el futuro acciones similares que falten el respeto a los valores religiosos.
La declaración enfatizó que tales pasos son esenciales para que la FIFA pueda sustentar sus afirmaciones de neutralidad y respeto a la diversidad cultural, humana y religiosa.
Su comentario